Hay que tener en cuenta en que etapa del embarazo nos encontramos. Si es en el último trimestre hay que subir un poco más las calorías porque el gasto calórico es mayor. Siendo así, nos gustaría ofreceros unas recomendaciones para una dieta de verano para embarazadas.
Consejos para una dieta de verano para embarazas:
– Mantenernos bien hidratadas y beber como mínimo 2 litros de agua.
– Elegir grasas saludables. Es preferible optar por un puñado de frutos secos en la merienda o a media mañana.
– Ingerir varias piezas de fruta al día, después de comer y cenar, en el desayuno o entre horas si tenemos ganas de picar.horas si tenemos ganas de picar.
– Una macedonia en el desayuno o en la merienda es otra idea fabulosa. Melón, sandía, pera, piña… ¡Deliciosa! Además la piña juega un papel muy importante en época de embarazo. Nos ayuda a combatir la reembarazo y nos ayuda a combatir la retención de líquidos… Todas las frutas cítricas nos ayudarán con este fórmula perfecta para retener mucho liquido. Todas las frutas cítricas nos ayudarán con este problema.problema.
Raciones durante el embarazo
Durante el embarazo , al tener la temperatura basal más elevada , tendremos más calor y esto en verano lo notaremos más. Por eso, es importante cuidar el tamaño de nuestras raciones. En otras palabras, comidas muy copiosas pueden dejarnos una sensación muy poco agradable, pesadez e incluso reflujo y acidez estomacal. Una idea muy fresquita es una agradable, es una ensalada de pasta con atún, un gazpacho, salmorejo o ensalada de lechuga, pollo cocido, alada de lechuga, pollo cocido, atún , pepino y nueces. Lo más cómodo es llevar siempre en el bolso ensaladas de conserva para comer donde quieras.
Por último mencionar en la dieta de verano para embarazadas, que un desayuno completo nos aportará la energía necesaria en esta situación.