La mayoría de personas sufren dolor de cabeza, generalmente de intensidad moderada, de manera ocasional. Esto puede deberse a múltiples factores y provocar dolores de diferentes tipos, desde la cefalea tensional (causada por la tensión muscular en hombros, cuello, cuero cabelludo y mandíbula) a las migrañas (un dolor punzante que suele comenzar en un lado de la cabeza, aunque puede propagarse a ambos, y que puede ir acompañado de visión borrosa y náuseas, entre otros síntomas). También podemos sufrir dolores de cabeza por otros motivos, “desde los cambios de estación y presión atmosférica a la intolerancia a algún alimento o debido a una incorrecta higiene del sueño”, explica Sandra Vaquera, nutricionista de Mediterranean Restaurant, un servicio de alimentación saludable on-line que cuenta con catering, tienda y servicio de asesoría nutricional.
Cuando se dan dolores de cabeza recurrentes, es fundamental identificar la causa y ponernos en manos de un facultativo que nos indique cuál es el mejor tratamiento. Es interesante, además, introducir una serie de modificaciones tanto en la alimentación como en los hábitos, que en líneas generales mejoran el cuadro cuando los dolores de cabeza son leves o moderados
Cuando estamos muchas horas sin comer se producen bajadas de glucosa que pueden provocar dolor de cabeza, además de que si comemos a menudo evitaremos las digestiones pesadas porque ingeriremos menos cantidad, Practicar deporte y tener una correcta higiene de sueño son otras de las pautas a seguir. Existen, además, determinados alimentos que conviene evitar en la medida de lo posible si padecemos dolores de cabeza.
Queso azul
Los lácteos en general y los quesos curados y muy fermentados en particular, como el queso azul, pueden dar lugar a cefaleas. Esto se debe a que son ricos en histaminas, unas moléculas derivadas de un aminoácido esencial, la histidina, que participan en numerosas funciones fisiológicas. Un déficit de diamonooxidasa (DAO), la hormona que metaboliza las histaminas, puede dar lugar a grandes concentraciones de estas moléculas en sangre, las cuales tienen un efecto vasodilatador. Es, por tanto, fundamental para prevenir y mejorar los dolores de cabeza evitar el consumo de alimentos ricos en histaminas, que pueden desencadenar también cuadros de astenia, fatiga y atopia.
Cítricos
Los cítricos son también ricos en histaminas, de manera que conviene moderar su consumo si tendemos a padecer cefaleas. “Es habitual que el consumo de cítricos, tan habitual en invierno, tenga un efecto vasodilatador que provoque dolores de cabeza”, señala Vaquera. Conviene, pues, no solo reducir la ingesta de naranjas, pomelo, limones y lima, sino también introducir otros alimentos con efectos beneficiosos sobre el dolor de cabeza. “La alcachofa, que activa la producción de bilis, es una buena aliada de nuestro hígado, y la piña, por poner otro ejemplo, al ser rica en magnesio, también nos puede ayudar a prevenir el dolor de cabeza”.
Café
Según una investigación publicada en The American Journal of Medicine, beber tres o más porciones diarias de bebidas con cafeína puede asociarse al dolor de cabeza en pacientes con migraña episódica. El problema es que reducir la ingesta de café también puede provocar dolor de cabeza. “Es habitual que al reducir el número de cafés que tomamos al día se produzcan cefaleas, pero nunca está de más tratar de averiguar si esos dolores de cabeza que se dan al reducir la cafeína no responden también a otros motivos que podemos estar pasando por alto”, indica el nutricionista de Medicadiet, Álvaro Sánchez. Otro estudio, en este caso realizado por la Clínica Diamond Headache de Chicago, señala, sin embargo, que la cafeína puede ser por sí sola tan efectiva contra el dolor de cabeza como algunos analgésicos, aunque la duración de sus efectos, entre cuarenta y cinco minutos y hora y media, sería menor.
Aguacate
Pese a que es sano a más no poder gracias a su alto contenido en ácidos grasos cardiosaludables, presentes también en el aceite de oliva y los frutos secos, lo mejor es retirar el aguacate de la dieta cuando tenemos dolores de cabeza o si somos propensos a ellos, pues es también un alimento rico en histaminas. Berenjena, espinacas, tomate, pimiento, acelgas o judías son otros alimentos saludables que, sin embargo, también son ricos en histaminas y que deberíamos sustituir por otros con un bajo contenido como manzana, pera, mango, lechuga, pepino, cebolla, calabacín o calabaza, entre otros.
Vino tinto
Si bien el vino tinto es especialmente rico en histaminas y, por tanto, un producto a evitar para prevenir los dolores de cabeza, todo el alcohol está contraindicado. “Además de rico en histaminas, el alcohol es hipoglucemiante, de manera que nunca es recomendable”, explica Sánchez. Vaquera, por su parte, recuerda que la bebida de elección debe ser siempre el agua, ya que la deshidratación también puede dar lugar a dolores de cabeza. “Conviene beber agua durante el día aunque no tengamos sensación de sed o introducir en la dieta alimentos muy ricos en agua, como el melón o la sandía”.
Embutidos
Son también ricos en histaminas, además de que contienen grasas saturadas de mala calidad que la OMS ha relacionado con la incidencia de ciertos tipos de cáncer. Conviene erradicar, pues, el consumo de embutidos, además de salchichas y otras carnes procesadas, y tener especial cuidado con la ingesta que hacemos a la hora de la cena. Así pues, las carnes procesadas, muy habituales en muchos hogares para cenar, deben ir fuera de la dieta tanto por su alto contenido en histaminas como porque no son saludables, además de que “provocan digestiones pesadas que pueden hacer que descansemos peor”, señala Vaquera. Para prevenir los dolores de cabeza, es muy importante garantizar una buena higiene de sueño, lo que pasa por “apostar por cenas ligeras, tratar de cenar siempre a la misma hora y evitar el consumo de cafeína y otros excitantes por la noche”, concluye la experta.
Además es aconsejable prescindir de las dietas ‘low carb’
La moda de las dietas bajas en carbohidratos también está relacionada con la aparición de cefaleas. “Una dieta low carb, si se realiza de forma temporal y controlada por un profesional, puede ser puntualmente una buena opción si deseamos perder peso y definir la musculatura, pero si se hace de golpe y sin unas pautas definidas puede dar lugar a dolores de cabeza”, explica Vaquera. Esto se debe a que “ante la eliminación drástica de los hidratos de carbono, el cuerpo responde con una hipoglucemia y ese cambio tan brusco en los niveles de glucosa puede hacer que nos duela la cabeza, entre otros síntomas”. Sánchez, por su parte, recuerda que “los carbohidratos se encuentran también en la fruta y es conveniente incluir este nutriente en cantidades moderadas en todas las comidas para mantener la estabilidad de los niveles de glucosa en sangre”.
Fuente: https://www.lavanguardia.com/comer/materia-prima/20201012/33721/alimentos-evitar-dolor-cabeza.html